Animal farm

India es el pais de las vacas, esto es de sobra conocido, pero no solo de las vacas, sino tambien de los camellos, los monos, los cerdos y los perros.
Esto es lo que te encuentras a diario aqui en Pushkar. Pero no todos reciben el mismo trato, porque como no seas un animal sagrado, la vas a pasar putas.
Me explico.
En el escalafon de santidad, el primer puesto es para la vaca. La iconica vaca sagrada. Ayer mismo, en la plaza de Pushkar, al lado de una obra, habia una vaca tumbada en el monton de arema para hacer hormigon. El obrero se acerca, acaricia a la vaca, se santigua ( o algo similar) y le da tres ostias a la vaca para que se aparte. Primero reverencia y luego palo. Pero bueno, aparte de esto, la vaca lleva buena vida.
Luego estan los monos, tambien sagrados, por el dios-mono Lord Hanuman. Los tejados de Pushkar estan llenos de ellos. A mi una vez uno se me meo desde un arbol, todos me dijeron la buena suerte que esto traia, yo hubiera preferido tener peor suerte...
En la carretera, cuando voy en bus de Pushkar a Ajmer, el conductor para a mitad de camino, y nos deja agonizando bajo el implacable sol mientras el alimenta con una caja de platanos a los langures del camino.
Los camellos llevan peor vida, se les utiliza como animal de carga, para safaris en el desierto y todo tipo de trabajos pesados.
Los cerdos en cambio viven en el paraiso. Ni hindues ni musulmanes lo comen, asi que campan a sus anchas entre montones de mierda y basura (algo que nunca escasea en India) y estan gordos y llenos de mierda, como buenos gorrinos. Se dan la gran vida los muy cabrones.
Los perros estan a la cola en cuestion de calidad de vida, en parte debido a una absurda creencia hindu, que establece que todo perro es la reencarnacion de alguien que en otra vida fue ladron o criminal, asi que la implacable ley del karma les recompensa con una vida de perros, con lo que todo el mundo trata a los perros como escoria. En Pushkar tienen un aspecto lamentable, aparte de por lo ya dicho, por ser una ciudad sagrada, estrictamente vegetariana. Imaginaos un monton de perros flacos y enfermos que no han probado ni un hueso en su vida...
Hasta las ratas tienen mejor reputacion, creo que tambien son sagradas....

Final de etapa

Ando de mudanzas estos dias, ya casi he acabado mis tres meses en Pushkar con la clasica sensacion agridulce que India deja en los paladares europeos.
Haciendo balance, parece ser que las cosas me han ido bien, a saber:
He completado 6 cuadros grandes y tengo otros cuatro pequenos en proceso.
He trabajado (y vivido) en un piso-taller grande, luminoso, comodo y barato.
Mi casero no solo no se ha aprovechado de mi ni me ha querido sacar las perras, sino que en lugar de eso, ha sido de gran ayuda en diferentes ocasiones, como la compra de mi nueva moto.
La moto es un regalo de Edel por mis 30 tacos, y he conseguido una buena oferta y estoy encantado (otro dia adjunto fotos), pero como no podia ser de otro modo, todo iba bien hasta que a ultima hora, justo cuando estabamos cerrando el trato, el tio del taller no ha podido reprimir un impulso de avaricia y malas artes y se ha sacado de la manga un cargo extra de 2700 rupias (unos 40 euros) por no-se-que documento que ha tenido que conseguir sobornando a no-se-quien. Esto nos ha llevado a una acalorada discusion y por no llegar a mayores le he pagado los putos 40 euros y me he llevado mi moto, el ha quedado como un timador y yo me he llevado lo que era mio.
en fin, para los que hayais estado en India lo entendereis....lo de la espiritualidad era cosa de Gandhi y del Sai Baba, el indio de a pie esta corrompido por el vil metal como cualquiera de nosotros y miente, y la lia con tal de sacarte un poco mas de lo acordado, esta en el ADN del vendedor indio, es asi.
De todos modos Priscilla, la reina del desierto y yo, nos vamos para Delhi el sabado, y desde alli la mando para Barcelona junto con los cuadros. Desde allí nos iremos a pasar dos semanitas por el estado de Himachal Pradesh, y eso sera el comienzo de la segunda etapa de la que os informare puntualmente.